Una de las principales dudas que surgen en los entornos industriales o comerciales es cuándo cambiar la banda transportadora. Esta puede sufrir algunos daños o producir ralentizaciones a la actividad empresarial. Ante todo, recordamos que en Jocar disponemos de los mejores modelos, los cuales satisfacen todas las necesidades.
Los 4 momentos que te advierten de que una banda debería ser reemplazada
Antes de desgranar los momentos, hay que tener en cuenta la importancia de que la banda funcione bien. Por un lado, se optimiza el tiempo y el dinero; por otro, evitamos que se produzcan paros en la cadena. Para ello, hay que detectar cuanto antes los problemas. ¿Cómo? Revisando el funcionamiento y prestando atención a estas claves.
1. Decoloración
El primer problema, que además es muy visible, surge cuando el tapete o diferentes partes pierdan su color original y empiezan a tener un aspecto descuidado. Esto puede ser normal, puesto que el paso del tiempo pasa factura.
2. Pruebas en la limpieza
Si en una limpieza rutinaria detectamos que algo no funciona bien, será otro caso flagrante de problemas. Por ejemplo, con el empeoramiento de los materiales cuando se pasa la bayeta o con un funcionamiento de la máquina más lento tras la limpieza.
3. Efectos químicos
Determinados productos pueden tener un grave impacto en la banda. Abrasiones, degradaciones o manchas, pero también fricciones pueden afectar al funcionamiento. Es una advertencia de que pueden venir más problemas.
4. Grietas y cicatrices
Al observar los bordes de la correa o las superficies, muchas empresas detectan grietas. Son el punto perfecto para que las bacterias y hongos queden depositados, incluso aunque se invierta en limpieza. No se debe poner en peligro a los productos.
Estos son los casos en los que se debe cambiar la banda transportadora para evitar problemas. Afortunadamente, en Jocar ofrecemos los mejores modelos de cintas.