A lo largo de la historia, en procesos productivos ha sido necesario el transporte de materiales o mercancías para su manipulación o almacenamiento. Antiguamente, estos procesos se realizaban cargando los materiales con ayuda de animales o simplemente a través de personas utilizando la fuerza humana.
Con la revolución industrial del siglo XIX, se empezaron a utilizar procesos automatizados para el transporte de los materiales, inventándose las primeras bandas transportadoras mecánicas en plantas de extracción de minerales. Desde entonces, los mecanismos han sufrido la innovación de la tecnología llegando a usarse los dispositivos que usamos en la actualidad. Pero ¿dónde puede ser útil una banda transportadora en nuestros días?
Uso y utilidad de las bandas transportadores
Las bandas o cintas transportadoras son usadas actualmente en diferentes sectores productivos, desde minería, construcción, aeropuertos, almacenes logísticos, etc. En definitiva, en aquellos sectores donde es necesario el transporte, manipulación o almacenaje de materiales o mercancías, estos sistemas automatizados son esenciales para llevar a cabo la actividad industrial.
La versatilidad de las bandas permite su instalación y funcionamiento de múltiples formas, pudiendo ser aéreas, inclinadas o planas. Mediante el ajuste necesario con rectas y giros, se pueden emplear en todo tipo de espacios.
Su funcionamiento es sencillo: los materiales o productos se disponen sobre una cinta o banda, mediante la cual son transportados desde un punto a otro. La cinta es movida a través de los rodillos transportadores. A partir de aquí, pueden usarse diferentes tipos de accesorios como guardas laterales, desviadores, topes, barandillas o ruedas en función de las necesidades de uso de la banda transportadora. Debemos contar con la supervisión de una empresa especializada para asegurar que las poleas y los motores son de máxima calidad.
En conclusión, en los negocios donde existe un flujo constante de productos o mercancías, una banda transportadora de calidad y personalizada es la mejor opción para optimizar el proceso.